El Presidente iraní, Mahmuod Ahmadinejad, inauguró el primer drone (avión sin piloto) bombardero fabricado en la república islámica, al que consideró como "el mensajero de muerte para los enemigos de la humanidad".
En una ceremonia realizada en ocasión de la "Jornada de la industria de la defensa al día siguiente de la puesta en marcha de la central nuclear de Bushehr, Ahmadinejad añadió que el drone, llamado "Karrar", "podrá ser un mensajero de salvación, paz y amistad para evitar conflictos y agresiones".
La central nuclear de Bushehr es la planta iraní construida por los rusos que, según Teherán, tiene fines únicamente civiles.
Según la emisora estatal iraní, que mostró imágenes de la ceremonia y del Karrar, el aparato está dotado de un motor turbo y está en condición de transportar varios tipos de bombas.
Tiene cuatro metros de extensión y puede "recorrer grandes distancias a alta velocidad", precisó la televisión, según la cual puede alcanzar los 900 kilómetros por hora y contar con una autonomía de cerca de 1.000 kilómetros.
El drone es el último de una serie de nuevos medios militares que Irán se está dotando: recientemente fue testeado una nueva generación de misiles tierra-tierra y según el ministerio de Defensa pronto se realizarán otras pruebas del misil Qiam-1.
El anuncio realizado por Teherán está destinado a calmar las preocupaciones de Occidente, que sospecha que Irán quiere aumentar su propio potencial bélico y dotarse de la bomba atómica.
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