Los
científicos aconsejan a los amantes de los perros, ignorar las aparentes
muestras de culpabilidad de sus mascotas, pues los animales no son capaces de
sentir vergüenza, informa el periódico ’The Independent’.
Los expertos
han descubierto que en realidad un perro no entiende por qué su dueño está
enfadado, y que cuando ’pone’ cara de culpa únicamente está reaccionando al
enfado de este.
Los perros
pueden aprender a distinguir las conductas que su dueño considera correctas de
los comportamientos incorrectos si se les castiga inmediatamente después de
haber hecho algo malo, dice la doctora Bonnie Beaver, profesora del Instituto
de Veterinaria de la Universidad de Texas A&M (EE.UU.).
"Cuanto
más tardemos en regañarlo, más débil será la asociación que establezca el perro
entre su travesura y el castigo. Los humanos tienen un deseo natural de saber
qué piensa el animal, pero solo podemos intentar interpretar su lenguaje
corporal y descifrar sus reacciones fisiológicas", añade la profesora.
Uno de los
primeros estudios científicos sobre la ’cara de culpa’ de los perros es el de
Alexandra Horowitz, profesora asociada del Barnard College de Nueva York.
En su estudio
titulado ’Dentro de un perro: qué ven, qué huelen y qué saben los perros’
(’Inside of a Dog. What Dogs See, Smell and Know’) grabó en video a 14 perros
cuyos dueños salieron de la habitación después de ordenarles no comer algún
apetitoso manjar que estaba a su alcance y observó las reacciones de los canes.
Algunos de ellos obedecieron a sus amos, otros no lograron resistir a la
tentación.
"He
descubierto que la expresión [de culpa] aparece frecuentemente cuando los
dueños regañan a sus perros, independientemente de si el animal le ha desobedecido
o no", dice Horowitz. "No quiero decir que los perros no puedan
sentirse culpables, simplemente que la ’cara de culpa’ no es uno de los
indicativos de ello", añade la experta.
Pero las certezas
científicas no hacen menguar el éxito de los sitios web de ’perros
avergonzados’, en los que propietarios de chuchos publican fotos de las
expresiones supuestamente afligidas de sus mascotas. Uno de ellos ha recibido
más de 58 millones de visitas desde 2012. "La gente entra en el sitio para
reír y para sentir apoyo", relata su creador, Pascale Lemire. "Ven
que su perro no es el único que hace travesuras. Nadie avergüenza a su perro
movido por la rabia, sino por cariño." Contexto
No hay comentarios.:
Publicar un comentario