El profesor y
la adolescente británicos, prófugos desde el 20 de septiembre, fueron
encontrados este viernes en el centro de Burdeos (Oeste de Francia), indicó la
policía judicial francesa.
"La
pareja, fue hallada en la vía pública en el centro de Burdeos", señaló
esta fuente, agregando que Megan, la menor de 15 años que se había fugado con
su profesor, gozaba de "buena salud".
Jeremy
Forrest, un profesor de matemáticas casado, de 30 años, contra el cual se
emitió una orden de arresto europea, se encuentra detenido en la comisaría de
Burdeos.
Megan
Stammers, 15 años, era su alumna en el instituto Bishop Bell, donde varias
estudiantes han revelado ahora que Forrest –músico aficionado- llegó a darle
clases particulares de música en sus dormitorios.
Los padres de
Forrest, Julie y Jim, lloraron en público en una tumultuosa conferencia de
prensa en Eastbourne, la localidad que se ha convertido en el centro de
atención de todos los medios británicos por el escándalo de la estudiante
fugitiva. "Por favor, ponte en contacto con nosotros", le suplicaron
los padres.
El padrastro
de Megan, Martin Stammers, reconoció en la BBC que la familia está
"devastada" y suplicó a la adolescente que llame a casa: "Sólo
queremos abrazarte y tenerte lo antes posible en casa".
Varios
testigos vieron a la pareja en París, y más en concreto en la torre Eiffel.
Pero la policía no dio crédito a ningún testimonio y siguió la única prueba
concreta que dispuso: una imagen recogida por las cámaras de seguridad cuando
tomaron el ferry en Dover, rumbo a Calais, el pasado 20 de septiembre, el mismo
día en que desaparecieron.
Según reveló
Jason Tingley, inspector jefe de la policía de Sussex, los billetes para el
ferry los reservaron días antes. En el barco viajaba también el Ford Fiesta
negro del profesor con el que su supone que entraron en Francia.
El
inspector-jefe, reconoció que las autoridades francesas, reaccionaron con
lentitud "porque tienen una perspectiva diferente sobre el caso, y no lo
consideraban una ofensa criminal".
La
investigación también se centró en los correos electrónicos y mensajes en las
redes sociales. Un día antes de su desaparición, Megan escribió en el sitio web
ask.fm, que estaba "excitada" por lo que deparaba el futuro, y se
despedía con un significativo 'YOLO' (You Only Live Once, "sólo se vive
una vez").
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