Hace años era un gesto cordial hacia el medio ambiente lucir en los espacios abiertos rodeados de naturaleza simpáticos enanitos de yeso –duendes o elfos entre los varoncitos, y hadas o sirenas entre las nenas-.
La tendencia ahora es representar criaturas salvajes de la ciencia ficción, como las esculturas de dos protagonistas de sendas sagas cinematográficas, que incluso se han encontrado entre sí en un par de ocasiones.
Estos predators y aliens biomecánicos, realizados a modo de collage con piezas de automóvil, son expuestos en una muestra de arte en metal en Bangkok, Tailandia.
Te invitamos a disfrutar de las criaturas jardinescas de marras, y menten a la madre de H.R. Giger, padre de las benditas criaturas que pueblan nuestras pesadillas, si no les inspira el miedo suficiente.
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