Con ello se estableció una zona de alerta desde Lázaro Cárdenas, Michoacán hasta Cabo Corrientes, Jalisco, indicó el organismo de dependiente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), según despacho de Notimex.
El Sistema Nacional de Protección Civil del Ministerio del Interior había pronosticado que al menos 17 de los 32 estados del México serán golpeados por el fenómeno que se espera afecte primero a Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán.
Antes de convertirse en huracán, el último boletín del Servicio Meteorológico Nacional, indicaba que la tormenta se ubicaba a 395 kilómetros al suroeste de Puerto Ángel, Oaxaca, y se desplazaba a 28 kilómetros por hora en dirección oeste-noroeste con vientos sostenidos de entre 110 y 140 kilómetros por hora.
En Chiapas, los municipios de las regiones Istmo-Costa y Soconusco fueron puestos en alerta, sobre todo en zonas montañosas, debido a posibles desprendimientos de rocas o tierra, principalmente durante la noche. En el estado de Oaxaca, los servicios de Salud se mantienen en alerta ante el agravamiento de la situación en las zonas que ya se vieron afectadas por las lluvias que provocó al menos unos 100.000 damnificados.
Otro estado en el cual se tomaron todas las previsiones es Michoacán, donde los cuerpos de socorro fueron acuartelados para atender cualquier contingencia.
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