Una nueva inspección de biólogos y técnicos de Santiago del Estero detectaron altos niveles de contaminación en los tributarios de la Cuenca Salí-Dulce, pública el diario El Liberal. Turistas y vecinos fueron testigos el martes de la presencia de peces muertos y la percepción de olores fétidos que provenían de los piletones del dique Frontal, en Terma de Río Hondo.
Recientemente los especialistas constataron una gran mancha de color negro que avanzaba sobre las aguas del embalse Río Hondo, acompañada de numerosos bagres y sábalos sin vida, que provendría del departamento Leales, en nuestra provincia. Como lo anticiparon, en los dos últimos días empezaron a observarse peces atrapados entre las piedras o formando la tradicional espiral cuando los efectos de la contaminación devastan a la fauna ictícola por falta de oxígeno en el agua.
Miembros del Comité de Cuenca, que volvieron a realizar una inspección por los ríos tributarios del embalse, dejaron trascender que bajó ostensiblemente el caudal de agua, lo que agravaría la situación en los próximos días.
En los ríos Troncal, Salí y Colorado es inexistente la presencia de oxígeno y se hallaron cientos de bagres sin vida y muchos más sumergiendo hacia la superficie en busca de oxígeno. “El olor es insoportable, sospechamos que es la vinaza que los ingenios, no la pueden contener en las lagunas y están volcando; encima el caudal de los ríos está bajando”, detalló una fuente consultada por el diario citado.
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