La compañía estadounidense de transporte y logística FedEx localizó un paquete con material radioactivo que había desaparecido durante un envío de Dakota del Norte a Tennessee. Las piezas encontradas se utilizan en algunos equipos médicos para hacer tomografías computarizadas.
Cuando se anunció la desaparición del material, el Gobierno federal emitió una alerta y en varios estados del país se emprendió una investigación. Finalmente la compañía FedEx halló un cilindro metálico que contenía germanio.
La portavoz de FedEx, Sara Muñoz, informó de que las barras fueron descubiertas en sus almacenes en Knoxville, en Tennessee. Se supone que el cilindro se separó del resto de la encomienda durante el envío. Aclaró que en ningún momento los elementos supusieron peligro alguno ya que no fueron sacados de su cilindro.
Muñoz aseguró que incluso si el paquete hubiera sido abierto, el nivel de radiación del elemento era muy bajo. "La exposición no hubiera causado daño, porque la concentración era muy baja. Habría que permanecer expuesto a este material durante unas 1.000 horas para que saliera alguna ampolla en la piel", concluyó.
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