El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, afirmó hoy que Estados Unidos, donde medio centenar de mujeres están condenadas a muerte, no tiene derecho a criticar a su país por la condena a lapidación de una mujer iraní."Tengo un listado de 53 mujeres condenadas a muerte en Estados Unidos y que actualmente esperan ser ejecutadas. En esta situación surge la pregunta: si el problema con una mujer en Irán se percibe como una violación de los derechos humanos, entonces, ¿por qué no se plantea el caso de las 53 mujeres en Estados Unidos?", criticó.
Se preguntó: "¿Por qué cuando allí cuelgan a gente, los medios no hacen ruido, y cuando esto ocurre en nuestro país, se ponen a dar gritos?. Si creen que de esa manera aleccionan al pueblo iraní, no es así. Ellos no pueden hacerlo. Matan a gente en Asia, África y condecoran a los asesinos". En lo que respecta a la ciudadana iraní Sakineh Mohammadi Ashtianí, condenada a muerte, Ahmadineyad señaló que el caso se lleva según el procedimiento judicial.
"Consideramos que este tema no plantea ningún problema. Estados Unidos plantea a propósito este asunto cuando en su país ese problema es mucho más grave", agregó el presidente iraní en una rueda de prensa.
El caso de Ashtianí, de 43 años y madre de dos hijos, acusada de adulterio y condenada a morir apedreada, despertó una oleada de duras críticas y protestas internacionales.
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