Marcelo
Segovia, el recluso que se fugó de la cárcel de Florencio Varela donde se
encontraba alojado tras haber sido condenado por el homicidio de Emiliano
Martinó, fue recapturado esta madrugada en Luján.
La detención
la concretó personal de la Policía Bonaerense de la DDI de Quilmes, a cargo del
comisario mayor Vicente Melito, pasadas las 23 horas, en la casa de los
familiares de otro recluso que cumple condena en el mismo centro de detención,
informaron a Télam fuentes policiales. La casa está ubicada en las calles
Ameghino y Alfonsina Storni, en las afueras de la ciudad de Luján.
El personal
de la DDI de Quilmes y de Inteligencia del Servicio Penitenciario Bonaerense
montaron el operativo que terminó con la detención.
Segovia se
fugó de la cárcel de Florencio Varela diez días después de haber sido
condenado, el 13 de julio último en juicio oral, a 29 años de prisión por el
asesinato del comerciante Emiliano Martinó, en 2010, cuando era llevado de
rehén en la localidad bonaerense de Ramos Mejía.
El Tribunal
Oral en lo Criminal 1 de La Matanza lo condenó a la pena de 29 años de prisión
y lo declaró reincidente, por lo que fue trasladado bajo fuertes medidas de
seguridad al Unidad Penal 23 de Florencio Varela, de donde se fugó.
El fiscal del
juicio por el crimen de Martinó (33), Sergio Antín, calificó, en ese momento, a
la fuga como "muy extraña" ya que de acuerdo a la comunicación
oficial del Servicio Penitenciario bonaerense, "se produjo el viernes en
horas de la tarde cuando Segovia fue visitado por su concubina, Natalia
Vallejos, la misma que en el juicio dijo que hacía cuatro años que estaba
separada".
"El
Servicio Penitenciario dio una pobre explicación. Dicen que la última vez que
lo vieron a Segovia fue en la visita, cuando estaba caminado por uno de los
pasillos del pabellón con su novia y que incluso recién se dieron cuenta de su
fuga a la noche, en el recuento", dijo Antín.
A raíz de
esta fuga, la titular del Servicio Penitenciario, Florencia Piermarini, dispuso
la separación de sus cargos de cinco oficiales jefes del penal, entre ellos el
director, y ordenó un sumario administrativo.
La condena: Segovia
había sido condenado tras un juicio oral por "homicidio en ocasión de
robo, en concurso real con portación de arma de guerra", al igual que sus
cómplices: Gonzalo Prelis (29), quien recibió una pena de 27 años de prisión; y
Claudia Pérez (36), una de 26 años de cárcel.
El hecho
ocurrió a las 0.30 hs. del 14 de junio de 2010 cuando Martinó llegó con su esposa y
su bebé de nueve meses a su casa de la calle Beruti al 100, de Ramos Mejía, del
partido bonaerense de La Matanza, luego de trabajar en una de las dos pizzerías
que tenía en Ciudadela.
La familia
fue abordada por cuatro delincuentes que ingresaron a la vivienda y robaron
dinero, alhajas y algunos electrodomésticos.
Un vecino
llamó al 911 y varios patrulleros llegaron a la casa, por lo cual los
delincuentes decidieron huir en la camioneta Peugeot Partner de Martinó, con
éste de rehén y al volante.
En la huida
se inició un tiroteo y a unas cinco cuadras de la vivienda, el rehén se arrojó
del auto y recibió un tiro por la espalda, a la altura del omóplato izquierdo,
que lo mató. Tras el tiroteo, uno de los ladrones murió y otros tres fueron
detenidos, quienes habían intentado descartar las armas, entre ellas la
homicida, que no obstante fueron halladas.