Entre la actividad de un volcán que aumentó de manera peligrosa su actividad durante el fin de semana, y un fuerte terremoto que se registró en la costa de Sumatra, los indonesios comenzaron hoy su semana de manera convulsionada.Doble desgracias para Indonesia este lunes: por un lado, un fuerte terremoto de magnitud 7,5 en la escala de Richter sacudió la costa de Sumatra —según reportó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el movimiento telúrico se produjo en el mar a las 11:42 horas, 240 kilómetros al sur de Padang, a una profundidad de 33 km—. Por otro lado, las autoridades indonesias iniciaron la evacuación de 40 mil personas tras elevar el nivel de alerta por la creciente actividad del volcán Merapi, situado en la isla de Java.
El coordinador de las operaciones de evacuación sobre el terreno, Widi Sutikno, señaló que el traslado de las personas a lugares seguros, en un radio de diez kilómetros del cráter, ha transcurrido sin incidentes desde por la mañana.
"Nuestra atención prioritaria son los niños, las mujeres y las personas mayores,” detalló Sutikno.
La actividad del volcán ha ido en aumento desde el fin de semana, cuando expulsó pequeñas cantidades de lava que llegaron al río Gendol.
Entre el viernes y el sábado, los temblores volcánicos aumentaron de 321 a 525, mientras que el número de erupciones de lava pasaron de 93 a 183.
El Centro de Vulcanología alertó de que, de acuerdo con sus observaciones, la erupción del Merapi podría ser parecida a la ocurrida en 1930, cuando sepultó 13 aldeas y mató a 1.400 personas.
A pesar de su magnitud, el Centro de Alertas de Tsunamis del Pacífico (NOAA) desestimó la opción de que se produzca un maremoto destructivo. No obstante, alertó a las "costas localizadas a menos de 100 km. del epicentro" por la "leve" posibilidad de un "tsunami local".
Las zonas alejadas al epicentro, agrega el reporte, "podrían experimentar sólo pequeños cambios en el nivel y corrientes del mar".
Por el momento, las autoridades indonesas no han reportado desgracias.
El coordinador de las operaciones de evacuación sobre el terreno, Widi Sutikno, señaló que el traslado de las personas a lugares seguros, en un radio de diez kilómetros del cráter, ha transcurrido sin incidentes desde por la mañana.
"Nuestra atención prioritaria son los niños, las mujeres y las personas mayores,” detalló Sutikno.
La actividad del volcán ha ido en aumento desde el fin de semana, cuando expulsó pequeñas cantidades de lava que llegaron al río Gendol.
Entre el viernes y el sábado, los temblores volcánicos aumentaron de 321 a 525, mientras que el número de erupciones de lava pasaron de 93 a 183.
El Centro de Vulcanología alertó de que, de acuerdo con sus observaciones, la erupción del Merapi podría ser parecida a la ocurrida en 1930, cuando sepultó 13 aldeas y mató a 1.400 personas.
A pesar de su magnitud, el Centro de Alertas de Tsunamis del Pacífico (NOAA) desestimó la opción de que se produzca un maremoto destructivo. No obstante, alertó a las "costas localizadas a menos de 100 km. del epicentro" por la "leve" posibilidad de un "tsunami local".
Las zonas alejadas al epicentro, agrega el reporte, "podrían experimentar sólo pequeños cambios en el nivel y corrientes del mar".
Por el momento, las autoridades indonesas no han reportado desgracias.
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