En el penal Rodeo II de Miranda permanecen cautivas 21 personas. Los reclusos reclaman cambios en la cúpula penitenciaria y atención médica. Los secuestrados acusan a Hugo Chávez. Más de cien familiares, mayoritariamente mujeres, de los reclusos del penal El Rodeo II viajaron hasta Caracas para realizar una protesta en las puertas del Ministerio de Interior y Justicia. Exigen una solución pacífica a la toma de rehenes para retomar las comunicaciones con el interior del penal.
El secuestrado director del penal El Rodeo II, Luis Aranguren, denunció que el gobierno de Hugo Chávez disparó contra las torres de la cárcel, muy cerca del lugar donde están los 21 trabajadores penitenciarios. En un video subido a YouTube, los trabajadores del Rodeo II piden a las autoridades que resuelvan el conflicto.
"Hoy [por el domingo 1 de mayo], aproximadamente a las 3:00 pm, alguien ordenó un ataque contra la torre, en varios cuartos donde estamos ubicados parte de los funcionarios, entraron balas, hubo un interno herido por armas de fuego", explicó. Además, denunció que "han ordenado ataques a la torre, sin importarles nuestras vidas. Hablo en nombre propio y en nombre de mis compañeros, sin ningún tipo de presión". Varios de los trabajadores que tomaron la palabra en el video, que dura 10 minutos aproximadamente, exigieron que se realice una mesa de diálogo en la cárcel, donde participen los internos y aseguraron que no fueron maltratados.
El motín comenzó el miércoles 27 de abril, cuando los presos se enteraron de que uno de los reclusos, en vez de ser trasladado a un hospital para recibir atención médica, había sido alojado en otro penal. Lograron que su compañero volviera al penal, pero persisten con la toma del establecimiento.
Además del responsable de la unidad penitenciaria, Luis Aranguren, permanecen cautivos custodios y personal administrativo y médico de la cárcel. Los presos le exigen al ministro del Interior de Hugo Chávez, Tareck El Aissami, y al viceministro Edwin Rojas que envíen un equipo médico para tratar a los enfermos de tuberculosis. La epidemia se habría desatado hace aproximadamente cuatro meses, y ya murieron dos presos. Además, reclaman la destitución del director del penal, del jefe médico de la cárcel, el doctor Miguel Jiménez y de la directora nacional de servicios penitenciarios, Consuelo Cerrada.En total, son 1.200 los presos que participan de la toma. En las afueras del lugar, permanece la Guardia Nacional Bolivariana.
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