Un joven
kuwaití perdió la vida el día de su casamiento, como consecuencia de un balazo
accidental que recibió de parte de un amigo. El invitado se disponía a
disparar, como es tradición en esos países, cuando un proyectil se le escapó, e
hirió mortalmente a la víctima por la espalda.
El incidente
tuvo lugar en la región desértica de Sulaibiya, donde las tribus tienen la
tradición de disparar al aire, durante las bodas tras concluir el enlace, según
publicó el portal Times Live.
El
responsable de la muerte del recién casado, “se entregó a la policía y aseguró
que no tenía ninguna intención de matar a su amigo”.
Las
autoridades kuwaitíes, elaboraron un plan para prohibir los disparos de
celebración durante las bodas tras el incidente.
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