Uno de los helicópteros del lujoso yate Octopus, propiedad de Paul Allen, cofundador de la empresa Microsoft, debió acuatizar este lunes "en forma forzada" momentos después de despegar desde la nave con rumbo al aeropuerto de Ushuaia.
El incidente no provocó lesiones a los ocupantes del helicóptero, ni derramó combustible al mar, informó el jefe de Prefectura Naval de Ushuaia, Daniel Vera.
El Octopus, de 126 metros de largo, es considerado el yate más lujoso del mundo que no pertenece a un jefe de Estado y es propiedad de Allen, quien fundara junto a Bill Gates la empresa Microsoft.
Vera dijo a Radio Provincia , que el hecho se produjo en la bahía de Ushuaia "a las 8.15" de hoy, cuando "se observó que el helicóptero que despegaba del Octopus y que aparentemente iba al aeropuerto acuatizó en forma forzosa al lado del propio barco".
El prefecto precisó que no hubo heridos por el hecho y que rápidamente un guardacostas de la fuerza se acercó para colaborar con los tripulantes del yate.
La aeronave "se remolcó hacia el barco, quedando amarrada, y se esperan mejores condiciones para subirla nuevamente al yate", agregó Vera.
"No hubo que lamentar víctimas y no hubo contaminación", precisó, a la vez que señaló que aún se desconocían los motivos que obligaron al piloto a maniobrar acuatizando, apenas había despegado.
Según datos reflejados por distintos sitios de Internet, el Octopus está equipado con dos helicópteros y con dos submarinos, uno destinado a estudios en el fondo del mar.
Entre otros lujos cuenta con una lancha proveedora de 19 metros y con una piscina en una de las cubiertas superiores.
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