Tenían todo estudiado para dar el golpe y escapar con un botín muy importante. Consiguieron las llaves de una de las puertas del banco; sabían con cuántos hombres de seguridad se iban a encontrar en la sucursal y contaban con una información fundamental: el horario que iba a estar abierto el tesoro. Con todos estos datos, la banda entró al banco y, en menos de 12 minutos y sin disparar un tiro, escapó con por lo menos un millón de pesos.
El episodio ocurrió ayer a la tarde en una sucursal del banco Galicia ubicado en Diagonal Norte 865, en pleno centro porteño, a sólo una cuadra del Obelisco y a seis cuadras de la Casa de Gobierno.
Todo empezó cerca de las cinco de la tarde, cuando el banco estaba cerrado al público.
Los ladrones eran ocho, estaban vestidos de jean y remera y la mayoría usaban anteojos negros.
“Entraron al sector de los cajeros automáticos y pegaron en la puerta un cartel que decía ‘cajero fuera de servicio’. De esta manera se aseguraron que no entre más gente. Luego, con una llave trataron de abrir la puerta que une los cajeros con el hall del banco. Como no pudieron, forzaron la cerradura y la rompieron. A una chica que en ese momento estaba por extraer dinero la metieron adentro de la sucursal”, aseguró a Clarín una empleada del banco.
En el momento que entraron los asaltantes había entre 10 y 15 empleados en la sucursal.
A todos los obligaron a tirarse al piso. Al policía y a un vigilador privado los separaron y les sacaron sus armas.
“Cuando estábamos en el piso los ladrones nos dijeron: ‘Vinimos a llevarnos la plata del banco. A ustedes no les vamos a robar nada. No hagan cagadas y nadie trate de hacerse el héroe. Piensen en sus familias, porque pueden terminar mal’. Todos les hicieron caso”, recordó la empleada.
Con la situación dominada, los asaltantes subieron al primer piso de la sucursal y con un ariete rompieron una puerta de blindex. Así llegaron hasta el tesoro.
“La puerta del tesoro tiene un horario de apertura que por una cuestión de seguridad se va cambiando día a día. Casualmente, o no, cuando los ladrones llegaron al primer piso la puerta estaba abierta. En ese momento nosotros estábamos contando el dinero de las operaciones del día para guardarlo. Por suerte los asaltantes metieron toda la plata en bolsas y se fueron sin lastimar a nadie... muy rápido. Sólo les importaba la plata”, aseguró una de las operarias.
Diego Videla, vocero del Banco Galicia, explicó a Clarín. “Se llevaron una suma bastante importante de dinero que es lo que queda en un banco en una noche hasta que es retirado por un blindado al día siguiente. Por ahora no sospechamos de nadie. Se llevaron el dinero del tesoro. Las cajas de seguridad ni las tocaron”.
Los investigadores dijeron que los ladrones escaparon con más de un millón de pesos. Hoy el banco va a terminar de hacer el arqueo para saber el monto exacto. Fuente: Clarin.com
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