Dos payasos callejeros de la ciudad de Villahermosa, sureste de México, aparecieron asesinados junto a un mensaje en que el grupo narcotraficante Los Zetas se atribuye el crimen y los acusaba de informantes del Ejército, informaron sus familias y autoridades.
Los cuerpos de Rigoberto López de 20 años, conocidos por su nombre artístico de ‘Resortijo’, y Francisco Méndez (‘Bigotito’) de 18, fueron hallados el fin de semana en un camino vecinal con varios disparos y atados, señaló telefónicamente una fuente de la procuraduría.
En el mensaje un grupo que firma como ‘Fuerzas Especiales Zetas’ se atribuye el crimen y los acusa de servir como informantes para la Secretaría (ministerio) de Defensa, de la cual depende el Ejército. La esposa de ‘Resortijo’ había denunciado que éste desapareció tras salir a presentar el espectáculo callejero con el cual se ganaba la vida.
“Salió a trabajar y volví a saber de él cuando unos compañeros me fueron avisar que los habían matado”, dijo a medios locales la mujer que pidió no ser identificada.
Los Zetas, un grupo creado en los años noventa por militares que desertaron para trabajar como pistoleros al servicio del narcotráfico, actúan principalmente en los estados costeros sobre el Golfo de México. Según autoridades mexicanas Los Zetas se deslindaron el año pasado del cartel del Golfo y se han convertido en un grupo criminal autónomo que además del trasiego de drogas incurre en delitos como secuestros de inmigrantes y robo de combustibles. Los Zetas actúan desde la frontera con Estados Unidos hasta países de Centroamérica como Guatemala y Honduras.
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