Al menos 35 personas murieron y más de 35.000 perdieron sus hogares a causa de las intensas lluvias de la semana pasada que causaron desbordamientos de ríos, inundaciones y aludes en el sureste de Brasil. Entre los estados más afectados están São Paulo, Río de Janeiro y Espírito Santo.En el estado de Minas Gerais 16 personas se ahogaron o murieron a causa de los deslizamientos de tierra. En el estado vecino de São Paulo, en ciudad de Jundiai, debido a un deslizamiento que provocó la caída de su vivienda fallecieron cuatro personas, entre ellas dos niños. En el estado de Espírito Santo cinco personas murieron durante esta semana debido a las inundaciones: tres de ellas cuando su vivienda cayó, una cuando intentaba cruzar un puente sobre un río desbordado y otra que fue arrastrada por la corriente. A principios de la semana, el Instituto Nacional de Meteorología de Brasil registró en una noche más de 40 mm de precipitaciones en Río de Janeiro.
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