El hombre que fue enviado a juicio oral por haber intentado hurtar cuatro pedazos de queso porque hacía dos días que no comía fue absuelto en un juicio abreviado en el que se aplicó el "principio de insignificancia" por el que había sido mandado a proceso. Fuentes judiciales informaron hoy que el juez correccional Walter Candela absolvió al acusado en un juicio abreviado que fue homologado por su defensa y la fiscalía el pasado 31 de marzo.
Se trata del caso que reveló esta semana en el que la Cámara del Crimen confirmó el procesamiento y envió a juicio por el delito de hurto en grado de tentativa a un hombre que intentó robar cuatro pedazos de queso del supermercado Día Discount porque hacía dos días que no comía.
El acusado explicó en la Justicia que vive en la calle con la subsistencia de pedir monedas y es desocupado. El juez de la Cámara Mauro Divito votó por absolverlo por la aplicación del principio de insignificancia, por el cual se rechaza la acusación porque lo hurtado es una afectación mínima al derecho de propiedad.
"En tal sentido, ponderó que intentó sustraer cuatro pedazos de queso en un supermercado, en circunstancias tales que ello importó un mal menor que el que cabe inferir que pretendía evitar, esto es, una afectación de su salud por falta de alimentos", sostuvo el magistrado. Pero sus colegas Juan Cicciaro y Rodolfo Pociello Argerich rechazaron esa postura y ratificaron el envío a juicio oral del acusado.
Cicciaro afirmó que la insignificancia "sólo puede jugar cuando es tal que lleva a despojar a la cosa de ese carácter, independientemente del mayor o menor valor de aquella, aspecto que es relevante sólo a los fines de graduar la pena". En esa línea, Pociello Argerich había dicho que la lesión al derecho de propiedad "es tan amplia que éste se verá afectado, más allá del valor económico que la cosa en sí posea"
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