Un jubilado británico fue condenado a seis años de cárcel este viernes tras declararse culpable de haber fingido su propia muerte en América Central para tratar de cobrar 520.000 libras (US$810.500) de su seguro de vida.
Anthony McErlean, de 66 años, se había hecho pasar por su esposa al afirmar que había muerto tras ser atropellado por un camión en Honduras en 2009.
Luego hubo una declaración de un testigo falso para respaldar su historia, alegando que el accidente ocurrió mientras estaba cambiando un neumático.
El testigo falso dijo que viajaba con McErlean para tomar fotos de la vida silvestre, y que tras el accidente los trabajadores de un campo cercano habían llevado el cuerpo a un pequeño pueblo llamado Santa Rosa de Aguán.
Pero la policía fue alertada por la Oficina de Fraude de Seguros, que había sido contactada por la empresa Acede European, que no le pagó ni un centavo a McErlean.
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