La agencia espacial de Estados Unidos (NASA) advirtió que un satélite de seis toneladas podría estrellarse en la superficie terrestre en menos de una semana.
El aparato lleva en órbita desde que hace 20 años lo lanzó el transbordador Discovery.
Según la NASA, la probabilidad de que el satélite acabe estrellándose en algún lugar poblado es de una entre 3.000.
Además, gran parte terminará deshecha por la entrada en la atmósfera.
Hasta ahora, nadie ha resultado herido por la caída de "basura espacial".
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